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Miguel Coria / Vulgar Topic

El concreto del Foro Independencia (Anexo Independencia) volvió a cimbrar con el oi!, ese sonido que decidió salir del punkrock y mostrar la crudeza y realidad de los barrios populares de la Inglaterra de finales de los 70s e inicios de los 80s, y posteriormente expandirse como plaga maligna en diversas partes del mundo.

En la actualidad, Lion’s Law, originarios de París, Francia, son embajadores mundiales de este sonido y estilo de vida, y en Guadalajara no fue la excepción, ante más de un centenar de personas que corearon cada una de las canciones.

Previamente, el show estuvo amenizado por dos grupos tapatíos, el debut de Himnos y su oi! clásico, que dejó complacidos a los asistentes que llegaron temprano; así como Hollywood Babilonia y su punkrock que también fue beneplácito.

Después llegó el turno de dos bandas de la Ciudad de México: la primera fue Filero, que hizo su hardcore-oi! y se llevó el aplauso de los presentes; asimismo, Sparrow 68, que (al igual con Bishops Green) volvieron a cautivar a los tapatíos con su oi! callejero salido del tradicional barrio capitalino de la Peralvillo.

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El banquete musical crudo y visceral fue servido finalmente para los parisinos quienes, con su actitud callejera, no defraudaron por ningún momento.

“For my clan, “Knock’em out”, “Skinhead”, “Every Night”, “On the terraces”, fueron entonadas con las gargantas de los asistentes, esas gargantas que después del último guitarrazo de cada canción eran saciadas con un sorbo de cerveza, esa bebida que hace unión, y los grupos de oi! históricos le han dedicado una melodía como si fuese el amor de su vida (en realidad lo es).

Entre la cerveza y la música, no podía faltar la fraternidad de los presentes. Aunque la música del oi! sea considerada solo como violenta y sin sentido por los falsos melómanos, ésta también habla de la lealtad, la incondicionalidad que deriva de la amistad de un grupo de amigos.

Al finalizar la tocada, los franceses dejaron su sonido y actitud en la atmósfera del Anexo, que, si todo pinta bien, podría repetirse el próximo marzo con una icónica banda de los suburbios del Este londinense. Cockney Rejects, ¡les estamos haciendo el llamado!

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